Me compré Comer Animales de Jonathan Safran Foer por casualidad, un día que vagaba yo entre las secciones de negocio y nutrición de una librería madrileña. Y me ha gustado. Me ha encantado, y me ha sorprendido.
Me ha sorprendido mucho Comer Animales. No es que no supiera que los animales sufren cuando los matan para comérnoslos, es que no sabía hasta que punto ese sufrimiento es innecesario, torpe y cruel. Nosotros comemos muy poca carne en casa, gracias en parte a que descubrimos cada día nuevas verduras y platos que cocinar con ellas con nuestra compra del grupo de consumo, creo que voy a replantearme algunas cosas de nuestra dieta…
Por ejemplo, he empezado por algo que hacía mucho tiempo que quería intentar, y es no tomar leche, un primer paso sencillo, pero que te deja fuera de tomarte muchos cafés de los que te tomas fuera de casa con los compis de curro, por ejemplo.
Os recomiendo Comer Animales si estáis dando una vuelta a vuestra dieta habitual, leedlo con calma, reflexionando y con espíritu crítico. Ya os iré contando cómo avanzan mis inquietudes «pseudoveganas»…
